por leonenredado » Lun May 04, 2009 12:58 pm
Solo mueren aquellos que son olvidados.
Sin ningún lugar a dudas Senna, fue uno de los mejores pilotos de todos los tiempos, si bien los números en la F1 son frios, y las estadisitcas dicen otras cosas, la desaparición fisica de Ayrton, tuvo una causa, y fue la rotura de la columna de dirección, el muere en la pista, las miles de fojas que tiene su caso, no lo avalan por el simple motivo que se terminaba la F1, el culpar a un dueño de equipo o diseñador, iba sin dudas a alejar muchísimos inversores, en ese año la F1 venia de autos con muchísima electrónica, con suspensiones activas controles de tracción y demás artilugios, AS en su afan de ir para delante siempre, se sentía incomodo ya que sus nudillos tocaban la parte superior del cocpit, sumado a un auto que había perdido el equilibrio por la falta de electrónica impuesta en el nuevo reglamento, por lo que el pidió que se lo modifiquen, y lo mas rápido fue reducir el diámetro de la columna de dirección, que a posterior seria esa unión la que fallaría.
Este accidente nos privo de ver una de las luchas mas lindas entre un Senna ya con un palmares inolvidable y un pibe en ascenso indiscutible MS. Se podrá decir mucho del festejo o no, al termino de esa carrera, lo cierto es que a los pilotos no se les comunicó el deceso hasta después del podio.
Comparar o tratar de decir quien fue el mejor piloto de todos los tiempos es técnicamente imposible, es hasta dificil comparar pilotos dentro de una misma epoca, pero la verdad es que existieron muchos reyes sin corona, como Moss, Clark o Villeneuve, como también existieron pilotos en el momento oportuno, con el auto oportuno, como Villeneuve Jr, Hill Jr, o Hakkinen, todos ellos escribieron una pagina de la historia de este deporte.
En la F1, el firmamento está lleno de estrellas. Unas brillan durante un momento, apenas un instante: unas vueltas, unas curvas. Otras, menos efímeras, mandan su lacerante fulgor y deslumbran nuestras retinas mas largamente: una carrera, una temporada. Por fin, hay algunas, muy pocas, que se convierten en astros guía; en una especie de Estrella Polar señalando el Norte. Ellas vigilan el rumbo de los pequeños seres mortales que, anclados con sus pies en el suelo, nunca alcanzarán la gloria, sino a través de sus resplandecientes gestas. Una de estas estrellas, entre las más brillantes, es la de Ayton Senna.
Al menos queda dentro mio, la alegría de poder decir que lo vi correr, en aquel 94 tuve la dicha de poder ir a la carrera de Brasil, junto al padrino de mi hija, fanático al punto que su hijo se llama Ayrton, ese día no pudo terminar la carrera que tanto quería ganar, largando desde la primera posición, una sana costumbre, pero no importó, el verlo lleno todas las expectativas. Después en 2001, la F1 volvería a verme, en las gradas de Interlagos, pero ya el rey no estaba, tribunas que antes fueron azules hoy eran rojas, Barrichelo había tomado la posta sobre la Ferrari Nº2, pero lejos estaba de helar la sangre como lo hacia Ayrton, lejos de provocar, lágrimas, de dolor o alegría. La magia ya se había ido. Para agregar a la anécdota tuve que hacer mas de media hora de cola para poder acercarme en el Cementerio de Morumbi, al lugar donde descansan los restos de AS.
Esta lluvia de mierda no quiere parar, esta lluvia de mierda no quiere parar...es la 4 que no para de llorar...
#NiUnDunaMas